El Día Mundial del Medio Ambiente, de acuerdo con el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), es “la fecha más importante en el calendario oficial de las Naciones Unidas para fomentar la conciencia y la acción global en favor de la protección ambiental”. Cada 5 de junio desde 1974, esta fecha ha sido conmemorada por más de 150 países y ha funcionado para promover los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) a lo largo del tiempo.
En 1972, la Conferencia de Estocolmo adoptó el lema “Una sola Tierra” para hablar de un único planeta que debíamos proteger. Hoy, después de 50 años, el Gobierno de Suecia, responsable de la campaña de 2022, adopta el mismo lema, pues el tema de salvaguardar nuestro único hogar sigue siendo tanto o más pertinente que hace medio siglo.
“Una sola Tierra” es un lema que busca poner en el centro a la naturaleza y a las personas. Pone en nuestra mente la necesidad de implementar acciones que aporten a la sostenibilidad; de impulsar políticas y medidas que nos orienten como seres humanos a llevar una vida más respetuosa hacia la naturaleza —cuyos recursos son finitos—; de tener sensibilidad hacia el planeta que nos da vida, en el cual habitan millones de personas con diferentes condiciones económicas, sociales y culturales.
Conmemoraciones como esta nos permiten fortalecer los vínculos entre gobiernos y organizaciones para la mejora de la política climática, la implementación de acciones, y la creación de planes estratégicos que nos ayuden a alcanzar la meta de 1.5° C para 2050.
Si tenemos una sola Tierra, hagamos lo posible por conservarla.
